viernes, 19 de marzo de 2010

El hombre espiritual

Crecimiento No. 1.
Clase No. 4

EL HOMBRE ESPIRITUAL.

Meta: decidir seguir a Cristo, sin importar nada del mundo rechazando el pecado.

Anteriormente ya vimos lo que es la carne (cuerpo y alma) y lo que es el espíritu.

A.- En esta clase vemos que hay dos clases de hombres, según se dejen dominar par la carne o por espíritu.

El Carnal = Rom 8:5-8 El espiritual = 1Cor.2;1-5
SUJETO A LA CARNE LIBERADO

Así como el botón de una rosa no se nota su belleza hasta que los pétalos se abren y se dejan ver el interior, así mismo el hombre carne tiene que irse despojando poco a poco de sí mismo, de sus egoísmos, de sus pasiones, etc., para que poco a poco se vaya descubriendo en e1al hombre espiritual.

En la parábola del sembrador, se nos habla de cuatro tipos de "oyentes", tres de ellos mueren (son camales) y solo uno sobrevive parque oye y hace fructificar la palabra “La semilla es la Palabra de Dios” (Luc.8:l1)
La semilla tuvo que morir y ser enterrada para poder tener vida y dar fruto; “En verdad les digo: si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda solo; pero si muere, da mucho fruto. El que ama su vida la destruye, y el que desprecia su vida en este mundo la conserva para la vida eterna” (Jn.12:24-25) así, el hijo espiritual es aquel que ha muerto a sus deseos, a sí mismo; a sus planes, a su mundo. Sin mirar lo que dejo, lo que queda atrás, sigue a Cristo.
Jesús vino a traemos un mensaje de verdad, de vida, mas no planeo que sus enseñanzas fueran algo agregado a nuestra vida. El nos pone una alterativa estar con El o estar contra El. “El que no está conmigo, está contra mí, y el que no recoge conmigo, desparrama” (Mat.12;30)

B.- Por consiguiente todo aquel que quiere seguir al Señor, debe pensar si está dispuesto a seguirle hasta el fin.

SEGUIR AL SENOR SIGNIFICA:
1.- Hacerlo renunciando a toda oposición o atadura sentimental “Sígueme y deja que los muertos entierren a sus muertos.” (Mat.8;22) “no es digno de mi el que ama a su padre o su madre más que a mí; no es digno de mi el que ama a su hijo o a su hija más que a mi” (Mat.10;37)
2.- Renunciar al mundo, a sus atractivos, a sus riquezas, a sus afanes. “No amen al mundo, ni lo que hay en él. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en el” (1Jn2;15)
3.- Aceptar que el mundo te atacara y te odiara por ser verdadero cristiano. “No sería lo mismo si ustedes fueran del mundo, pues el mundo ama lo que es suyo” (Jn.15;19)
4.- Aceptar que tendrás que reconocerlo delante de los hombres y aceptar que te insulten. “Al que me reconozca delante de los hombres, yo lo reconoceré delante de mi Padre que está en los cielos.” (Mat. 10:32)
5.- Aceptar todas las pruebas como discípulos fieles y obedientes. “Al contrario, en todo demostramos ser auténticos ministros de Dios: somos muy perseverantes; soportamos persecuciones, necesidades, angustias, azotes, cárcel, motines, fatigas, noches sin dormir y días sin comer. En nosotros la gente puede ver pureza de vida, conocimiento, paciencia y bondad, actuación del Espíritu Santo y amor sincero. En nosotros esta la verdad y la fuerza de Dios. Luchamos con las armas de la justicia, tanto para atacar como para defendernos. Unas veces nos honran y otras nos insultan; recibimos tantas críticas como alabanzas. Pasamos por mentirosos aunque decimos la verdad, por desconocidos aunque nos conocen; nos dan por muertos aunque vivimos; se suceden los castigos, y todavía no hemos sido ajusticiados. Nos creen afligidos, y permanecemos alegres; tenemos apariencia de pobres, y enriquecemos a muchos; parece que no tenemos nada, y todo lo poseemos” (2Cor.6;4-10).
6.- Andar en la luz. “Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no caminara en tinieblas, sino que tendrá luz y vida.” (Jn.8;12).
7.- Dejar de hacer lo malo que antes hacíamos e imitarlo para llegar a tener los mismos sentimientos que tuvo El. “Tengan unos con otros los mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús.” (Fi1.2:5)

Seguirlo es amarlo más que a nada ni a nadie, con todo tu coraz6n, con toda tu mente, y con todo tu cuerpo, guardando sus mandamientos. Es tener oídos y escucharle: es decir su llamado o a todo lo que te pida: "Si Señor" y muriendo a ti mismo, resucitar para Cristo y dar fruto.

C.- Esta es la vida del hombre espiritual; es la vida de un hijo obediente, amante, que ha logrado con su comunión diaria con Dios ganar un lugar especial en su amor y para lo cual Dios ha prometido una corona de vida “Feliz el hombre que soporta pacientemente la prueba, porque después de probado recibirá la corona de vida que el Señor prometió a los que lo aman.” (Sant. 1:12). Es el hombre que logra vencer el mal a base de hacer el bien. “No te dejes vencer por lo malo, mas bien vence el mal a fuerza de hacer el bien” (Rom. 12:21)
En su vida ya no hay los mismos atractivos que tienen los otros hombres, pero sus objetivos y atractivos son mas firmes.
No se trata de una vida pasiva y fácil sino que debe ejercitar su libre voluntad, elegir, decidir entre el bien y el mal, negarse a la tentaci6n, buscar constantemente mejorar su vida espiritual y asemejarse cada día mas a Cristo. Pero el secreta es estar dispuesto a dejarse conducir. Intentar hacer esto por nuestros propios medios, equivale a tratar de empujar un tren, pero en el momento en que aceptamos dejamos conducir del Espíritu Santo, decir "SI" equivale a la acci6n del maquinista al dar marcha al tren.

D.- Ahora que eres consciente de eso, estas dispuesto a seguir al Señor, a decir "Si", a ser un hijo espiritual?. Si es así, has tomado la decisión más acertada de tu vida.

HAZ TU COMPROMISO CON EL SENOR ESTE DIA.
1.- Entrégate a ti mismo y ofrece toda tu vida a1 Señor.
2.- Promete que lo obedecerás y lo amaras

Tarea: Escribe tu testimonio para 1a gloria de Dios, (hazlo como si estuvieras escribiendo para tratar de convertir a a1guien que no cree).

Memorizar: 1Cor.2;14-15, Jn.8;12, Rom.12;21, 1Jn.2;3-6.

Cita Lema:
"Os exhorto, pues, hermanos, por la misericordia de Dios, a que ofrezcáis vuestros cuerpos como una víctima, santa, agradable a Dios; tal será vuestro culto espiritual. Y no os acomodéis al mundo presente, antes bien transformaos mediante la renovaci6n de vuestra mente, de forma que podáis distinguir cual es la voluntad de Dios; lo bueno, lo agradable, lo perfecto". (Rom. 12:1-2)

1 comentario:

  1. Linda reflexión, como podemos vivir una vida en la carne y otra en el espíritu apartados del pecado, les comparto mi testimonio de sanidad divina en mi Pag. www.creeenjesusyserassalvo.blogspot.com. Reciban muchas bendiciones de El Salvador, San Salvado.

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